Iván La Riva, viajando por las rutas de La Libertad

(Entrevista)

Con la mochila viajera, Ernesto 'el che' Guevara considerado el primer viajero. Lleva un botón de cada lugar visitado.

La Libertad posee gran diversidad turística, flora, fauna en abundancia. Ella ostenta las tres regiones: costa, sierra y selva. Una hermosa región que debe ser conocida por todo peruano y sobre todo por todo liberteño.

La poca difusión turística no permite desarrollar una actitud de valorar lo nuestro. Se da más importancia a lugares y destinos turísticos del exterior; por ello no se puede hablar de una verdadera identidad.

Un liberteño conoce el 99 % de los distritos en la región. Iván La Riva, abogado, maestro universitario y miembro del Comité Consultivo de la Sociedad Iberoamericana deDerecho del Turismo, en representación del Perú. Así como consultor nacional en turismo, presidente de la Asociación Peruana de Docentes en Turismo (Adetur- Perú).

Además, ha sido Diputado Nacional del Congreso de la Republica (1990 -1992), miembro de la Cámara de Turismo de La Libertad (Cadetur). Escribió varios libros como ‘Viajero antes que Turista’ (2005), ‘Legislación Turística Peruana’ (2010), entre otros.

Es ferviente admirador de Ernesto ‘el che’ Guevara por considerarlo el primer viajero.

En su mochila viajera tiene un botón de cada lugar que ha visitado. Un hombre con diferentes desempeños; pero lo que más lo destaca, es su amor por conocer lugares nuevos y aprender de ellos.

Aquí nos relata sus hazañas.

¿Cómo decidió ser un viajero?

- Desde la época escolar me interesaba mucho los temas sobre historia del Perú. En los años 70 era fácil viajar por el Perú, nos íbamos en los camiones, ayudábamos a manejar en los carros, me fui desplazando y comencé a encontrar un gusto a los viajes. Pero en año 75, siendo estudiante de derecho hice un viaje de tres meses con un amigo argentino en la sierra, vinculando nuestros viajes a conocer más sobre el tema de brujería. Entonces visitamos muchos pueblitos lejanos de la sierra en búsqueda de esos maestros. Estuvimos en costa y sierra del Perú;  primero, por la toda la zona de Lambayeque, Huancabamba (Piura); luego, llegamos hasta amazonas en un viaje que nos demoró tres meses viviendo con la gente y eso me  vinculó más a ese Perú profundo tan interesante. Ese viaje me marcó, dejé de ser un chico que viaja para conocer y me convertí en un  hombre que viajaba para aprender, paralelo a ello comencé a leer muchos libros de la realidad peruana: todo lo que es Ciro Alegría, José María Arguedas, López Albujar, novelas peruanas que me vinculaban a una realidad distinta a la de la costa;  todo eso fue importante para comenzar a entender  este país y sacar el mayor provecho a  los viajes.

¿Qué tan fácil o difícil es concretar un viaje?

- Solamente implica entusiasmo, ganas de hacerlo. Acabo de terminar las clases y habíamos quedado con unos alumnos a acampar este fin de semana al bosque de Cachil; pero no hemos conseguido el número ideal de alumnos, por lo tanto el presupuesto no se ajustaba a la realidad y debido a ello, los chicos que no han podido viajar al bosque de Cachil, me dijeron: profesor, ¿a dónde podemos ir empleando lo que tenemos? Y acordaron que nos vamos a las aguas termales de ‘El Edén’, que se ubica en la sierra de Huamachuco. Entonces, para viajar solo hace falta ganas de aprovechar las oportunidades de viajar.

¿Cómo organiza su viaje (itinerario)? ¿De qué se compone su kit viajero?

- Permanentemente vivo organizado Tengo mi ropa de viaje en una parte de mi ropero porque para viajar es necesario un pantalón, una casaca y zapatos especiales, ya los tengo separados; la mochila ya está lista. La mochila viajero está ahí, siempre esperándome; también mi báculo, mis bastones, etc. Para salir en cualquier momento que se presente un viaje.

¿Ha visitado los 83 distritos de La Libertad?

- Solo 82, porque Ongón es un distrito al que todavía no llega movilidad y todavía no he visitado. Desde Tayabamba son dos días de camino bajando hacia la selva. Entonces, para llegar a Ongón primero hay que llegar a Tayabamba en un viaje de dos días más dos días a Ongón son 4 días. Habría que estar en la zona dos días más, con ello sumarían 6 días; más 4 de regreso, son 10 días. Ya no tengo el físico lamentablemente ni el tiempo necesario para ir a Ongón, sin embargo lo sobrevolé cuando necesitábamos visitar los restos de El Gran Pajatén Partimos en helicóptero desde Juanjuí subiendo a la provincia de Pataz y en la ruta no pudimos descender en El Gran Pajaten por mal tiempo, le pedí al piloto si podríamos sobrevolar la zona y me concedió  ese privilegio de ver Ongón desde las alturas.   

¿Cuál de los 83 distritos de La Libertad lo sorprendió? ¿Por qué motivo?

- Todos tienen sus encantos Por ejemplo, Santiago de Chuco su encanto es la casa de Vallejo, Julcán tiene a san Juan Bautista el patrono, las punas de Uro Maqui, las punas de san Carlos, la papa. Para mí, cada distrito incluso caseríos tiene algo, sería injusto escoger alguno.

¿Una anécdota importante de su vida como viajero?

- Era mi primer viaje a la lejana provincia de Bolívar, y en esa época era muy difícil llegar. Había que avanzar a Cajamarca de ahí a Celendín, cruzar el puente balsas que está en el departamento de Amazonas (que hasta ahora hay que usar esa ruta, y un camioncito que tomé en Celendín llegaba hasta san Vicente de Pusac), ahí me bajé junto con los pasajeros y ellos me explicaron que había que esperar un camión que pase rumbo a Bolívar y mientras no pasase ese camión tenía que esperar y quedarme en San Vicente de Pusac. Entonces enviamos a avisar con un amigo de la zona para que de Bolívar envíen un volquete  del concejo y nos lleve, pues llegar a Bolívar era dificilísimo.

Entonces aquella tarde me impacienté, agarré mi mochila y me fui caminando con un amigo rumbo a Bolívar, pensando que estaría 'aquicito nomas'. Un señor  llamado Pio Moreno nos dijo que nos podía servir de guía para cortar camino porque si seguíamos la travesía de la carretera iba ser muy difícil llegar. Así comenzamos a caminar. Llegó la tarde, y luego la noche y don Pio prestó un burrito para que cargue las mochilas y a eso de las 4 de mañana llegamos a Langotea, después de una caminata de 12 horas; totalmente extenuados, yo no podía regresar a Pusac porque quedaba mal con la gente que me había despedido.

Al día siguiente continuamos caminando y a lo lejos vislumbré una camioneta que se aproximaba, pues la gente que se quedó en Pusac había avisado por teléfono a Bolívar que yo - en un arranque de locura - me había ido caminando y temían que me pasara algo en el camino. El alcalde fue quien tomó su camioneta, me encontró a las 10 de la mañana y junto a él, la familia de don Pio que se enteró que me acompañaba. Estuve muy agradecido por ir en mi rescate en esa travesía tan difícil. Pero debido a la falta de combustible para el vehículo, no nos queda otro remedio que regresar a Pusac. Regresé por el mismo camino andado y llegué a Pusac. La gente se reía de que caminé en vano, después se subieron a la camioneta y volvimos a Bolívar.

¿Cómo se puede mejorar la promoción turística en nuestra región?

- Yo creo que les llegó la hora a los alcaldes, tanto por la ley de municipalidades, como por la ley de turismo. Ahora encarga al desarrollo turístico a los presidentes regionales y a los alcaldes. Acabo de recibir la ingrata noticia que el gobierno regional designó 0.03 % para el turismo, ahora solo les queda a los alcaldes promocionar sus pueblos. Ellos deben buscar sus presupuestos, hacerse asesorar por los profesionales, trabajar con los colegios y con su propia gente. Porque hay un dicho muy cierto: "no se ama lo que no se conoce", para que la misma gente promocione lo que tiene.

¿Por qué se considera viajero antes que turista?

- Hay una diferencia entre viajero y turista. Mientras que turista es la persona que va aun lugar toma fotos, conoce; el viajero viaja a ese mismo lugar pero con otra óptica de aprender lo bueno que tiene ese pueblo y que en ese lugar se produzca un cambio. El viajero va, aprende, vive en el lugar y viene enriquecido de ese pueblo. Siempre recomiendo a mis alumnos que viajen como viajeros y no como turistas. 

¿Cuál son los mayores contratiempos que ha tenido como viajero? A partir de sus experiencias ¿Qué recomendaciones daría a los viajeros?

- Anteriormente la dificultad era la accesibilidad a los lugares, las carreteras eran malas y si había carretearas, había  camiones o acémilas. Sin embargo ahora la red de caminos está mejorando. La carretera está asfaltada a Huamachuco, Santiago de chuco, Cascas y Yanasara; también hay buenos buses, pero siempre falta un buen alojamiento, calidad e higiene en los servicios, que a veces afecta a los viajeros.

Si todo viaje es una búsqueda ¿Qué espera encontrar en su próximo destino y cuándo decide que es momento de partir de un lugar?

- Todo está en el tema espiritual. Cuando viajamos necesitamos enriquecernos como personas espiritualmente y cuando ya he bebido de un pueblo, de sus leyendas, artesanía, gastronomía y de su idiosincrasia ya es momento de partir a otro. Pero cuando ese pueblo es grande, hermoso, hospitalario a veces regresamos. He perdido la cuenta de cuantas veces he vuelto a Huamachuco, a ese pueblo lo he visto nacer turísticamente.

¿Qué viaje está preparando ahora?

- El jueves partimos para Otuzco, luego a Julcán y terminamos en Huamachuco, para bajar a Yanasara y subir hasta Marcahumachuco. Es un viaje de dos días bastante intenso pero siempre con cosas nuevas y temas interesantes. 

Foto archivo: Iván La Riva junto a sus estudiantes de la UNT.